8 juegos divertidos para conectarte con tu perro

Investigaciones recientes nos han demostrado que mostrar dominación o la teoría alfa de la antigüedad no es aplicable a los ejercicios de entrenamiento de perros, por lo tanto, jugar con tu perrito no se trata de imponer tu superioridad sino de conectarte, ganar su confianza y pasar un buen rato juntos. Aquí te dejamos 8 juegos divertidos que los ayudará a conectarse y disfrutar mientras lo entrenas.

Juego # 1 – Llamarlo por su nombre

Muchos perros tienen dificultades para generalizar los comportamientos aprendidos, es decir, si le enseñamos algo en un lugar no significa que lleve esa información a otro. Recuerda que al principio enseñamos a nuestros engreídos a estar abiertos a recibir información y aprender. El éxito en el entrenamiento dependerá de qué tan bien lo prepares para estar dispuesto a aprender y recibir una recompensa.

Juega a llamarlo por su nombre donde quiera que vayas. Este es un ejercicio de calentamiento muy bueno, especialmente cuando vayas a un nuevo entorno con olores o sonidos desconocidos. Simplemente di el nombre de tu perro y cuando te mire dale una galleta deliciosa. Repite esto al menos 5 veces, pero realmente hasta que se concentre en ti. Solo una vez que se haya conectado contigo, continúa con las actividades planificadas.

Juego # 2 – El juego de la sombra

La mayoría de nosotros soñamos con lograr pasear a nuestros engreídos en libertad, sin correa en un parque para perros. Esta es una meta maravillosa para trabajar y enseñar un recuerdo es la respuesta más importante a una señal que su perrito aprenderá. 

Comienza en casa en un ambiente tranquilo con tu perrito con una correa. Empaca algunas golosinas para obtener recompensas y comienza a caminar en cualquier dirección. Cada vez que tu perro te alcance, dale una galleta. Si tu cachorro se adelanta, simplemente gira suavemente 180 grados y coloca una golosina en el suelo. Mientras tu perro mastica la galleta, camina unos pasos hacia adelante, pero prepárate para que te alcance nuevamente para darle otra golosina cuando lo haga. Ve hacia adelante, hacia atrás, de lado, rápido, lento, detente, corre, camina, rodea árboles, sobre rocas y cualquier otra cosa que puedas hacer para que tu perro te siga como una sombra.

La idea de este juego es hacer que tu perrito te siga de buena gana, no arrastrarlo por el cuello. Tómate el tiempo para mostrarle lo que está haciendo en lugar de sorprenderlo con un giro rápido. Juega este juego en todos tus paseos cuando lo domines en casa, intenta hacerlo con correa y luego en libertad. La idea es que les guste igualar tus movimientos y alcanzar tu velocidad.

Juego # 3 – “Dáme eso”

Los caninos son oportunistas y carroñeros por naturaleza, por lo que puedes contar con que recoja algo que no debería en algún momento de su vida. El juego «Dáme eso» no solo te prepara para esta situación, sino que también te proporciona un comportamiento básico para muchos otros juegos, como “Busca el juguete” y “Regresa la pelota”. Nunca saque un juguete de la boca de un perro a la fuerza, o puede causar un reflejo de oposición donde lo agarra más fuerte y posiblemente crearle tensión que podría conducir a una agresión posesiva.

Comienza con correa o en una habitación pequeña donde no pueda escapar y haz que juegue. Tira uno de sus juguetes favoritos en el piso y cuando lo recoja, llámalo y jala suavemente con la correa. Con una mano agarra el juguete y pídele que te lo «dé». Con tu otra mano presenta un regalo para cambiarlo por el juguete. Cuando te de el juguete, elógialo de inmediato y dale el premio.

Practica esto con la mayor frecuencia posible con juguetes y otros artículos que pueda recoger y siempre recuerda que todo lo que intercambias debe tener un valor mayor que el artículo en su boca o el juego perderá todo su valor. Para desafiar su comprensión de este juego, da la señal y espera la respuesta antes de sacar la galleta de recompensa.

Juego # 4 – Las escondidas

Aunque parezca que los juegos que jugamos son solo por diversión, siempre ten en cuenta que los cachorros aprenden sus habilidades para la vida a través del juego y la experiencia con sus compañeros de camada y otros perros. Las escondidas es un juego divertido para perros y humanos, pero también ofrece una habilidad muy real para tu perrito. Imagina que estás de excursión y te separas de él. Es un pensamiento aterrador, pero si has jugado a las escondidas como un juego, has preparado a tu engreído para mantener la calma en esta situación y usar sus sentidos perrunos para buscarte.

Comienza en casa simplemente llamándolo desde otra habitación y prémialo con un regalo y un elogio cálido cuando te encuentre. Sigue practicando escondiéndote cada vez más lejos para que tu perro tenga que buscar en toda la casa para encontrarte. Haz que un amigo distraiga a tu perro y luego aléjate y escóndete detrás de un árbol o un arbusto. Tan pronto como esté fuera de la vista, llámalo y cuando te descubra dale un buen regalo. Cuando tu cachorro haya captado la idea del juego, haz que los escondites sean más ambiciosos e incluye a toda tu familia para que pueda encontrarlos a cada uno de ustedes.

Juego # 5 – Encuentra el juguete

Siempre que puedas, haz que tus engreídos usen sus «sentidos perrunos» en el juego. Fomenta la creatividad, las habilidades para resolver problemas y el autodescubrimiento al permitir que tus perros exploren el mundo a través de sus propias experiencias. Haz que el juego “Encuentra tu juguete” sea especial utilizando solo el juguete mientras juegas,  mantenlos guardados hasta que el juego comience.

Comienza con dos cajas y un valioso juguete. Haz que tu perro se siente y que te vea colocar el juguete debajo de una de las cajas. ¡Ahora baraja las cajas y luego dile que «encuentre el juguete»! Si es necesario, puedes ayudarlo señalando la caja correcta y alentándolo a que lo olfatee, empujando o volteando la caja. Elógialo calurosamente cuando encuentre el juguete y pídele que te lo de. Canjéalo por una galleta para asegurarse de que recuerda el juego “Dame”, pero luego devuélvele el juguete como recompensa por su arduo trabajo.

A medida que tu perro domine este juego, puedes desafiarlo más agregando más cajas o usando cajas que necesiten abrirse en lugar de voltearse. Nunca permitas que tu engreído se sienta frustrado con este juego, de lo contrario puede ser difícil entusiasmarlo con probar nuevos juegos u otros ejercicios de entrenamiento.

Juego # 6 – Olfatea

Lo mejor de los juegos de perfume para perros es que todos los perros pueden hacerlo sin importar su edad. Incluso un perro mayor puede jugar fácilmente a su propio ritmo para alcanzar el maravilloso premio al final del camino.

Haz una ‘bolsa de aroma’ atando algo delicioso, maloliente y viscoso en un trozo de tela y sujétalo a una cuerda para que puedas usarlo para crear un rastro maloliente en el suelo. Tire de la bolsa en un camino sinuoso y en zigzag que rodee los árboles, debajo del follaje e incluso a través de charcos. Deja un premio especial especial al final del camino para cuando lo encuentre.

Juego # 7 – Traer la pelota

Algunos perros vienen preprogramados para jugar juegos de búsqueda, pero no todos están interesados en este, por lo que es importante conocer los intereses y juegos favoritos de su perro. No intentes forzar un juego en un perro que simplemente no está interesado en él, ya que es una excelente manera de arruinar tu relación con tu engreído.

Muchos perros corren detrás de un juguete o una pelota, pero comienzan el juego cerca de ti para construir primero una base. Deja caer la pelota frente a ti y dile “dame”. Cuando recoga la pelota, elógialo generosamente y luego aplica el juego “Dame” y cambia la pelota por un regalo. Tómete tu tiempo y aumente lentamente la distancia que lanzas la pelota. Asegúrate de ser coherente con este juego para que tu perro sepa que el regreso es parte del juego. Si tiene problemas, simplemente regresa a la distancia donde tuviste éxito por última vez y juega allí un poco más hasta que puedas empujar la distancia una vez más.

Juego # 8 – Confía en mí

La clave para ganarte el respeto y la confianza de tu perro es escuchar tu voz silenciosa. Si los empujas hacia el miedo, no podrán aprender y no se sentirán cómodos contigo realizando esa tarea. Si te encuentras con un lugar donde tu perro se siente incómodo, está bien, quédate allí un rato y hazles saber que estará bien. Te lo agradecerán dándote todo su corazón y alma.

Los ejercicios de confianza pueden ser desafiantes en momentos en que no salen según lo planeado, pero siempre que los dividas en incrementos alcanzables, puedes construir un vínculo duradero con tu perro con una fuerte raíz en la confianza. Un juego popular es caminar al costado de ellos mientras están en echados. Para comenzar con este juego, deberás enseñarle a echarse y comenzar a caminar alrededor de tu perrito mientras él se queda en el piso.

Pídele a tu perro que se acueste y alábalo suavemente cuando lo haga. Camina hacia su cola párate a su altura para que tengas un pie a cada lado. No te quedes allí mucho tiempo, camina hacia su cabeza o y dale una galleta por confiar en ti. Repite eso unas cuantas veces más hasta que se sienta cómodo contigo allí. Tómate tu tiempo y asegúrate de que solo progrese cuando se sienta cómodo, da un paso hacia adelante desde su cola para que tenga un pie a cada lado de su cuerpo. Continúa hasta que esencialmente puedas tirarte encima de tu perro y caminar de la cola a la cabeza con él completamente cómodo y divirtiéndose.