Bañarse en el mar y jugar en la arena son las actividades que más disfrutan nuestros engreídos cuando los llevamos a la playa.

A los perros les encanta revolcarse en la arena y disfrutar del mar pero antes de organizar un divertido paseo a la playa y disfrutar de un gran día, es importante comprobar que la playa a la que asistiremos permite el ingreso de perros, una vez confirmado el destino es momento de preparar la mochila de tu engreído.

Procura un bebedero con su botella de agua y si tiene un recipiente para almacenar unos cubitos de hielo sería ideal para que tome su agüita fría. No te olvides de llevarle un juguete para que se entretenga mientras tu disfrutas de un buen libro, crema solar y un protector para sus patitas, no te olvides llevar una bolsa para recoger sus necesidades eso es lo más importante para mantener nuestras playas limpias. 

Una vez acomodados utiliza el protector solar, sobre todo en las zonas con poco pelo y poca pigmentación, evita la exposición al sol en las horas centrales del día, pon a tu engreído en la sombra cuando la irradiación es más intensa. Una vez en el mar no lo pierdas de vista y de preferencia escoger una zona no muy profunda donde no haya corrientes fuertes, recuerda que beber agua de mar puede provocar problemas gastrointestinales.

Después de disfrutar de un gran día de playa brindarle un baño de agua dulce servirá para eliminar los restos de sal y de arena y ayudará a proteger su piel y pelo, asegúrate de revisar bien las orejas de que no tengan agua ni arena en su interior. Si después de unos días ves que tu engreído sacude la cabeza o se rasca los oídos con insistencia, deberás consultar con tu veterinario ya que podría tratarse de un síntoma de otitis muy común en estos casos.